España se enfrenta al último reto que le queda por
alcanzar en su particular 'lustro de oro', que empezó con la conquista
de la Eurocopa de 2008. Desde entonces, a la selección de Vicente del
Bosque solo se le ha escapado un torneo, la Copa Confederaciones de
Sudáfrica, y únicamente le queda por batir, entre las grandes
selecciones, a Brasil, con la que no ha llegado a medir fuerzas.La selección española tiene esta noche la oportunidad de cerrar sus cuentas pendientes de un plumazo. Levantar el título y hacerlo ante la 'pentacampeona' en su propio templo: Maracaná. Del Bosque y sus pupilos viajaron a Brasil con esa motivación en sus mochilas y están a solo 90 minutos de lograr el gran desafío.
El ambiente que se encontrarán será infernal. A medida que ha ido pasando el torneo, la 'torçida' ha modificado su admiración, en especial hacia Iniesta, por un odio progresivo que esta noche alcanzará su máxima expresión. El patriotismo brasileño y su devoción casi religiosa por el fútbol ha convertido este encuentro en una cuestión de honor. Maracaná rugirá contra una España que aspira a recuperar su mejor versión tras sufrir más de la cuenta y de forma agónica en la semifinal contra Italia.
Para ello, Del Bosque recuperará a Cesc, una vez superadas las molestias que le impidieron medirse a la 'azurra'. Y le otorgará la misma libertad de movimientos que en el debut frente a Uruguay, donde el de Arenys comandó las operaciones con una portentosa actuación. El técnico confía en que la movilidad y la verticalidad del blaugrana devuelva a España esa superioridad incontestable que mostró ante los 'charrúas'.
La idea sería repetir el once del debut, pero los problemas físicos de Soldado apuntan a un equipo titular con Fernando Torres en la punta de lanza. El delantero del Chelsea es el 'pichichi' del torneo, con cinco goles y, si Soldado no se recupera, Del Bosque mantendrá la confianza en él. El seleccionador dio descanso en el entrenamiento del viernes a Piqué y Ramospara que se recuperaran del sobresfuerzo realizado ante Italia.
Hay un precedente entre ambas selecciones en Maracaná, en el Mundial de 1950, con goleada local (6-1). España solo ha batido a Brasil una vez en competición oficial, en el Mundial de 1934 (3-1). Desde entonces, solo otra victoria española (3-0) en un amistoso en 1990. En el Mundial del 62, 1-2 para Brasil; en el del 78, 0-0 y en el del 86, 1-0 para los brasileños, con el polémico gol fantasma de Míchel. Aún hay otro triunfo 'carioca' (1-0), en un amistoso en 1981. La última vez que se vieron las caras, en otro amistoso en 1980, hubo tablas (0-0).
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